Hola BlogeroX, reconozco no haber estado muy activo esta semana con respecto a las noticias y actualizaciones en este medio. La verdad estuve muy atareado con mi trabajo en la materia, pero ya estamos de vuelta con una muy gratificante historia, de aquellas que te dan combustible interno para seguir confiando en el hombre.
Hace un par de semanas atrás el Sr. Michael Fishbach co-fundador de Conservación de la Gran Ballena, realizo un viaje junto a su familia y amigos hacia el mar de cortés en México. Lo que en comienzo era un viaje fotográfico, se convirtió en un rescate, ya que al ver la joroba de un ballena detenida en medio del mar comienza la odisea. Se percatan que no estaba muerta, si no que estaba atrapada por unas redes de pesca al parecer olvidadas. Rápidamente el equipo se pone en campaña de tratar de cortar las amarras del cetáceo, haciéndose cada vez mas dificultoso lidiar con el gran tamaño de este mamífero, ya que de un solo aletazo de esta ballena podría voltear la débil embarcación.
Luego del transcurso de un par de horas la tarea se realiza convirtiéndose en un éxito completo, llegando al punto de ser felicitados por la misma ballena a través de un espectáculo de giros y saltos. Sin duda una maravillosa historia de esperanza y amor, que a la vez hace un tremendo contraste que la actitud perversa de un sector de humanos inconscientes y despiadados.
Señor X
Hace un par de semanas atrás el Sr. Michael Fishbach co-fundador de Conservación de la Gran Ballena, realizo un viaje junto a su familia y amigos hacia el mar de cortés en México. Lo que en comienzo era un viaje fotográfico, se convirtió en un rescate, ya que al ver la joroba de un ballena detenida en medio del mar comienza la odisea. Se percatan que no estaba muerta, si no que estaba atrapada por unas redes de pesca al parecer olvidadas. Rápidamente el equipo se pone en campaña de tratar de cortar las amarras del cetáceo, haciéndose cada vez mas dificultoso lidiar con el gran tamaño de este mamífero, ya que de un solo aletazo de esta ballena podría voltear la débil embarcación.
Luego del transcurso de un par de horas la tarea se realiza convirtiéndose en un éxito completo, llegando al punto de ser felicitados por la misma ballena a través de un espectáculo de giros y saltos. Sin duda una maravillosa historia de esperanza y amor, que a la vez hace un tremendo contraste que la actitud perversa de un sector de humanos inconscientes y despiadados.
Señor X
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