Existen diversas explicaciones para tratar de entender quienes son estos seres. Algunos dicen que son Ángeles, otros dicen que son seres de otros planos Astrales, otros que son niños especiales (Índigos y Cristal) y por ultimo otros que dicen que somos todos.
Todos tienen razón, cada uno de nosotros es un ser de luz, esto es que nosotros somos materia, o lo que es lo mismo, energía, va en nosotros como canalizamos estos dones, tomando conciencia del poder que tenemos oculto, estudiando y practicando para desarrollarlo, durante mucho tiempo, se pensó que las personas que tenían poderes de telequinesis o de percepción extrasensorial, eran fenómenos, pues bien la verdad es que los fenómenos somos nosotros, por no desarrollar estas habilidades, todo se puede hacer, Dios nos ha dotado con un gran espíritu y la capacidad divina de poder elevarnos en la evolución humana, gracias o mejor dicho, tristemente por el libre albedrio, es que no nos damos cuenta o no queremos darnos cuenta de nuestras capacidades, toda la energía que tenemos guardada, sale de nuestro cuerpo a través de nuestros poros, al igual que el sudor, por ende solo con practicarlo, se puede ver, a esta le llamamos aura.
Quienes transitamos los caminos de la vida buscando nuestra realización espiritual vamos por muchos lados para saciar nuestra sed. A veces encontramos verdades claras, otras son espejismos o informaciones incorrectas.
Siempre avanzamos, porque en algún lugar del Universo debe estar lo que buscamos, resonando con nosotros, de lo contrario no habría motivo de búsqueda. Muchas veces incorporamos conocimientos, conceptos, frases sin entender totalmente lo que significan pero suelen resonar fuerte en nuestro interno y lo aceptamos como verdades incuestionables. Una de esas frases que yo acepté como auténtica, pero no terminaba de comprender racionalmente era: Somos seres de luz.
Pero hay otro tipo de energía, que es mas bien considerada divina, que es la luz que irradia nuestros espíritus, ellos brillan con luz propia, cada vez que ascendemos, nos convertimos en energía pura y esta es luminiscente, desgraciadamente no todo es bonito, ya que los denominados espíritus erróneos, seres que perdieron su posibilidad de ascender en su muerte, ya sea por suicidios, asesinatos, accidentes o vidas mal llevadas, que quedan vagando en este plano, sin la capacidad de subir y prepararse para la próxima vida, ellos trataran siempre de seguir a las personas que mas luz irradien, si bien es cierto que hay humanos que tienen una capacidad de conciencia superior al resto (nacen con este don), es cierto también que esta se consigue practicando, sacando las telarañas de nuestra conciencia y así por ver la verdadera luz.
Debemos tener mucho cuidado con estos seres erróneos, ya que al aferrarse a una vida pura, la siguen incluso intentando arrebatarle la vida para poder viajar con ellos hacia el siguiente paso, ya que ellos tienen una mayor espiritualidad y las puertas se abren el doble, es nuestro deber el cuidarlos para que crezcan sanos, tanto de cuerpo como de espíritu.
La ciencia dice, respecto a esto que: “Somos seres Carbono-Químicos-Eléctricos-Lumínicos”
Somos seres en cuerpo físico, por lo tanto estamos dentro de un cuerpo que realiza procesos químicos. La composición química del cuerpo humano desempeña un rol importante en el proceso evolutivo. La dieta, el ejercicio físico y el aire que respiramos y nuestro estado mental, todo contribuye a esta composición química que nos da equilibrio y bienestar. Uno de los sistemas químico-biológico con un importante rol en nuestra evolución es el sistema endocrino.
El sistema endocrino es uno de los sistemas principales que tiene el cuerpo para comunicar, controlar y coordinar el funcionamiento del organismo. El sistema endocrino trabaja con el sistema nervioso y el reproductivo, y con los riñones, intestinos, hígado y con la grasa para ayudar a mantener y controlar:
- Los niveles de energía del cuerpo.
- La reproducción.
- El crecimiento y desarrollo.
- El equilibrio interno de los sistemas del cuerpo (llamado homeostasis).
- Las reacciones a las condiciones al ambiente (por ejemplo, la temperatura), al estrés y a las lesiones.
Es decir, el sistema endocrino es una réplica física de las estructuras de energía sutil que forman nuestros cuerpos energéticos. Las glándulas endocrinas producen sustancias químicas altamente especializadas, las hormonas, que se liberan en la química del cuerpo en momentos precisos y por razones específicas. Las hormonas tienen funciones claves, entre ellas, el abrir las zonas dentro del cerebro que pueden desencadenar nuevas capacidades mentales y nuevos estados de conciencia para nuestro crecimiento espiritual. Por eso necesitamos un equilibrio hormonal.
me parece interesante , yo tengo problema de tiroides......y tengo sobrepeso........como puedo encontrar la energìa que me ayude........gracias
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